El 9 de octubre, el artista plástico Miguel Ángel concepción, inauguró junto con la vicepresidenta de la Diputación de Huelva María Luisa Faneca, la exposición denominada "La Culpa la tienen los Ojos", en la Sala Siglo XXI del Museo Provincial de Huelva y que gestiona la Diputación, una muestra multidisciplinar, como es costumbre en el artista, donde podremos observar sus últimas creaciones compuesta por una veintena de dibujos a lápiz pastel sobre papel y otros con carbón, además de una serie de cuadros en gran formato y dos proyecciones de video, donde el artista reflexiona sobre la mirada aislada del artista, la violencia externa e incluso el canibalismo. La obra de Concepción de una poderosa factura realista, muestra un mundo violento, con imágenes descarnadas, llenas de violencia, pero también mucho sentido del humor, como cuenta Baldomero Toscano en un texto del catálogo " Miguel Ángel Concepción es pintor que posee ese grácil arte de brujería. Tradición, cultura, técnica, talento e instinto. Y algo aún más importante y que señalo como una de las principales aportaciones de su obra: la ironía." Además presenta la novedad de dos videos en 3D que según palabras del autor "Los dos videos presentes en el proyecto son anaglifos, es decir, convertidos en tridimensional partiendo de una imagen bidimensional, creando una síntesis de visión binocular. Sangre y Agua. El anaglifo me interesa no solo por la posibilidad de la tridimensionalidad de la imagen o el video en cualquier formato, si no como forma de sublimación de la imagen, de darle un mayor carácter vouyerístico, incluso de sublimar los más bajos instintos para que siempre encontremos la culpabilidad en los ojos."
Con un cierto tono nihilista y existencialista Miguel Ángel presenta una obra rotunda y dura muy conceptual, y que acompaña con un precioso catálogo diseñado por Víctor Pulido, amigo personal del artista con textos de Baldomero Toscano, Eva Vaz, José Luis Piquero y de él mismo y con fotografías de Rocío López Zarandieta, que además contiene varias obras anaglifas y que se acompaña con una gafas rojo cian para su disfrute. Según Palabras de Baldomero Toscano "Con sus trabajos más recientes, “La Culpa la Tienen los Ojos!”, Miguel Ángel
Concepción sigue ahondando en una obra que, con el paso del tiempo y siendo un
pintor aún joven, se muestra como una visión del mundo articulada y coherente.
Una obra centrada en el cuerpo humano. Y en esta serie, al igual que en otras
anteriores, en el rostro como objeto. Parafraseando
a Willem De Kooning, su pintura al óleo está hecha para pintar la carne humana.
En los “Silencio” y otras obras de esta serie se atreve audazmente con el vacío. Y un pintor solo se hace cuando es capaz de enfrentarse sin miedo a él. Cuando se arroja sin red sobre el espacio del cuadro. En títulos como la magnífica “Crushed” y en algunos retratos, el de su madre devorada por el cruel alzheimer, encuentro ciertos ecos de Francis Bacon. Como una marea que fluye secreta y rumorosamente lejana. No por técnica, ni quizá por influencia directa o consciente ni por las formas fantásticamente extremadas de la pintura del irlandés inglés, pero si por esa manera cruda, directa y reveladora de abordar la obra. Sin la profunda distorsión de Bacon pero poseído de semejante espíritu. Acerca y mucho Miguel Ángel su mirada al rostro humano hasta enseñarlo de manera mentirosa porque como decía el propio Bacon se necesita de la mentira para llegar a la realidad. Y eso es al fin y al cabo el arte. Ese es el Juego. Y esa es la estela y rumbo de su pintura".Hasta el 29 de Octubre.
Imágenes de la exposición.
En los “Silencio” y otras obras de esta serie se atreve audazmente con el vacío. Y un pintor solo se hace cuando es capaz de enfrentarse sin miedo a él. Cuando se arroja sin red sobre el espacio del cuadro. En títulos como la magnífica “Crushed” y en algunos retratos, el de su madre devorada por el cruel alzheimer, encuentro ciertos ecos de Francis Bacon. Como una marea que fluye secreta y rumorosamente lejana. No por técnica, ni quizá por influencia directa o consciente ni por las formas fantásticamente extremadas de la pintura del irlandés inglés, pero si por esa manera cruda, directa y reveladora de abordar la obra. Sin la profunda distorsión de Bacon pero poseído de semejante espíritu. Acerca y mucho Miguel Ángel su mirada al rostro humano hasta enseñarlo de manera mentirosa porque como decía el propio Bacon se necesita de la mentira para llegar a la realidad. Y eso es al fin y al cabo el arte. Ese es el Juego. Y esa es la estela y rumbo de su pintura".Hasta el 29 de Octubre.
Imágenes de la exposición.
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